Las acciones de Bankia han abierto este lunes prorrogando las caídas con un recorte del 3,08%, con lo que su precio ha bajado a 0,63 euros, lo que supone su nivel más bajo desde la salida a bolsa en julio de 2011. Tras este récord, sin embargo, han cambiado de tendencia y han entrado en verde a media mañana. Hoy es el último día antes de que mañana, martes, empiecen a cotizar once millones de nuevas acciones de Bankia, fruto de la doble ampliación de capital con la que la entidad culminará su recapitalización y que representan cerca del 60% de su capital.
Asimismo, al igual que sucedió durante el tramo final de la semana pasada, el valor está registrando un alto volumen de negociación. A media hora del inicio de la negociación, los accionistas habían intercambiado 6,2 millones de títulos de Bankia por un importe de 4,2 millones euros, lo que la convertía en la quinta cotizada más negociada hasta ese momento.
Las acciones de Bankia experimentaron el pasado jueves un gran movimiento, por parte de inversores institucionales, que deshicieron posiciones cortas y llevaron a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) a anunciar que revisará los movimientos de la sesión del jueves, para comprobar si todo se ajusta a la normativa vigente.
Ese día, los inversores intercambiaron 49,93 millones de acciones respecto a un capital social registrado en bolsa de 19,93 millones de títulos, casi 150 veces más que la media diaria anual. El descenso en la sesión fue del 51,4%, en tanto que el viernes la caída fue menor, del 4,41%, aunque sus títulos cerraron a un mínimo histórico de 0,65 euros. Aquel día se movieron otros 38,8 millones de acciones, lo que fuentes del mercado atribuyen a ventas en corto al descubierto de los fondos de inversión con vistas a la ampliación de mañana.
Este martes se pondrán en circulación un máximo de 11.762 millones de nuevas acciones, que se emitirán a un precio de 1,352 euros y en los que la matriz del grupo, BFA, está dispuesta a invertir hasta 275 millones de euros ya que los minoritarios han rechazado acudir a la operación. Será entonces cuando los pequeños inversores podrán vender las acciones que recibieron por el canje de productos híbridos (participaciones preferentes o deuda subordinada) y que, entre la quita aplicada en el cambio y las caídas bursátiles, han perdido un 70% de su inversión.
Estos inversores, en primer lugar, sufrieron una quita media del 38% que fue la que aplicó el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob) antes de efectuar el canje, a 1,35 euros por título; a lo que hay que sumar las pérdidas en Bolsa, que han reducido el precio de la acción por debajo de los 0,70 euros (un 52% menos que el 1,35 que pagó el Frob). Es decir, un inversor que tuviese 10.000 euros en híbridos habría perdido 3.800 euros con la quita y 3.220 con las caídas en bolsa, en total, un 70% de lo invertido.
Para los inversores que acudieron a la salida a Bolsa del banco y mantiene las acciones, la pérdida de valor de su inversión supera el 99% (99,8% en 0,63 euros) si vendiese ahora sus títulos.
Fuente: «El País».